sábado, 24 de agosto de 2013

Mi pequeño aporte al mundo: Videojuegos.

  Hoy voy a hablar de videojuegos. De los que conozco al menos, que es como el 1% de la vida. ANYWAYS. Hace casi tres semanas mi hermano me regaló la PS3 que tanto le pedí desde onda hace ene tiempo más un día. Porque entre que le hinché las pelotas por un iPod, una 3DS o una PS3, él creyó que la última era más rentable para mi (y para él cuando tuviera ganas de un PES). De todas formas, la pedí casi exclusivamente por una razón: THE LAST OF US. 

  Mi visión y conocimiento respecto a los videojuegos son bien limitados, y más bien se remiten a jugar Mortal Kombat en PC, Mario Kart en un Nintendo 64, y uno que otro Assassin's Creed en XBox hace chorrocientos mil años. Ahora, y a mis 24 años, varios caminos -muy whatever como para hablar de ellos- me han llevado a probar como nunca el sillón del living y crear el ambiente adecuado para prender la consola, que sería más o menos así: Vaso de jugo, cerrar las cortinas, prender la estufa, cambiar de sillón cada una hora, y no pescar whatsapp/facebook/etc.


 


  Ahora, ¿Por qué The Last of Us? (Y esto es spoilerfree). Lo primero que se me viene a la mente es "WHY THE HELL NOT?" para luego responder lo siguiente: Obviamente el hype entorno a este juego es grande. Inmenso. Colosal. 

  Yo ya había jugado el primer Uncharted, así que tenía una idea sobre cómo enfrentar este juego de los queridos Naughty Dog. Sin embargo, y siendo bien sincera, me topé con algo que jamás imaginé. Una obra de arte llena de colores, sonidos, emociones, miedo, y angustia. Porque no miento si digo que tenía que jugar con la luz prendida, nunca de noche, y siempre tratando de pensar fríamente. Pero es imposible. El juego está lleno de mini-misiones que me sacaron más de una cana verde. Literalmente me sentaba a putear la tele y a pedirle ayuda a jugadores amigos porque no podía ser que con cinco balas tuviera que matar a 10 milicos y 4 infectados. Pero la angustia no se limitaba a las escenas de violencia, sino que se expandía a todo. La relación entre los protagonistas (Joel y Ellie) te llega directamente al corazón. Sin darte cuenta te ves atrapado en escenas de llanto y compasión, temes mucho por sus vidas y quisieras que no tuvieran que pasar por todas esas desgracias. Quisieras salvarlos y llevarlos directamente a su destino pero, oh wait, ¿Qué destino? ¿Y por qué? Eso lo sabrá sólo si lo juega. Y no lo digo yo, una newbie, lo dice TODO EL MUNDO.




  Sufrí mucho cuando terminé ese jueguito. Quise jugar la opción newgame+ enseguida, pero un consejo: dense un break. El nivel de estrés alcanzado es bastante alto y es recomendable relajar el cuerpo y la mente con algo más light. Podría ser su indie game piola, o su partida con Ezio Auditore. Y es que le tengo mucho cariño a Ezio, porque pese a que lo conocí en una XBox (bastante desagradable para mi), no puedo sino agradecerle todas las tácticas de parkour que aprendí y que he aplicado a otros juegos.

  Desde el año pasado y hasta el día de hoy, cada miércoles visito a mis abuelos sagradamente. Almorzamos tranquilitos y luego yo me retiro al segundo piso, lugar donde se encuentran los headquarters de mi hermano mayor. Y es que desde que me enseñó a usar la consola, para mi no era complicado armarme un panorama para la tarde: Assassin's Creed I, II, III, etc. Bring it on. Una trilogía (la de Ezio al menos) simple, algo monótona, piola. No requiere mucha habilidad y estrategia más que aprender a pasar piola entre la gente y CORRER CORRER CORRER. La mitad del juego corriendo y la otra corriendo, pero sobre los techos de la ciudad. Lo hermoso de esos juegos es el setting. Pueblos Italianos del siglo VI. Iglesias. Campos. Vestidos grandes y armaduras. Personajes históricos y acentos. Pequeños detalles que llegan a tu corazón.
  
  Debo decir también que en su momento probé un Call of Duty, así como el Battlefield 3, pero soy muy nena para que los juegos que no sean de un sólo jugador, y para qué hablar de mi puntería. Pero I'm working on it.


  Actualmente me encuentro jugando Machinarium (juego piolísimo de estrategias, te hace pensar mucho, es bien amoroso y NECESITO retomarlo), Guacamelee! (MARAVILLOSO juego ambientado en México, muy simpático y rápido) y el Uncharted 3 porque Nathan Drake <3

PD: The Last of Us es TAN completito y hermoso que hasta su banda sonora debe ser rescatada por separado. Está compuesta por el sorprendente Gustavo Santaolla y, sinceramente, se roba el 51% del juego. Porque ¿Qué es una escena de balazos van balazos vienen sin su emocionante música de fondo?




lunes, 12 de agosto de 2013

sábado, 3 de agosto de 2013

"Sabes lo que te hará bien? Ve esta serie"

Cuando uno se enfrenta a ciertos tropiezos en la vida, generalmente se trata de buscar algo que ayude a sobrellevar la situación. Algunos empiezan a tomar más de la cuenta y otros se buscan un hobby. Yo veo series. Si, series, porque qué más gratificante que envolverte en las vidas ficticias de personajes que amarías conocer en la vida real. Y cuando una serie te envuelve de verdad, se nota; horas viendo un capítulo tras otro, esperar sagradamente el episodio semanal, y amenazar con pena de muerte virtual a quién se atreva a spoilear en tu presencia. 

Hace dos años sufrí un quiebre amoroso muy serio. Lo pasé horrible, pero dentro de ese 'luto', alguien me dijo "ve esta serie, te hará bien". Ingenuamente pensé que se trataba de una comedia tipo Friends (que me encanta) o algo policial del tipo CSI. Pero no, era American Horror Story, una serie de terror y suspenso, dirigida -curiosamente- por Ryan Murphy (creador de Glee). Y me encantó. 


Encontrar ese tipo de series donde realmente no te identificas con nadie, pero a la vez sientes que los conoces a todos no es fácil. El suspenso de no saber lo que va a pasar, cuando finalmente ocurre lo peor que pudiste imaginar. Y fue así como seguí semana a semana cada episodio, hasta que se acabó. Posteriormente fue un año lleno de vacíos (no shit). Esperar a la segunda temporada fue terrible y excitante a la vez. Y así llegó el año 2012 y me devoré los capítulos. Lo que más rescaté fue que eran los mismos personajes dentro de una historia completamente nueva, y estaba tan bien hecha que jamás se cruzó por la cabeza un comentario del tipo "Pucha, me gusta como hace de monja, pero en la temporada anterior le salía mejor el personaje de nana". JAMÁS. Then again, la temporada volvió a agotarse y aquí estoy, esperando otro año entero para la tercera entrega que, nuevamente, es totalmente diferente a las anteriores.



Ahora, Breaking Bad. Esto deberé comenzarlo con un gran ASKDAFLKFASDJADKAJHD. Porque si, comencé a verla hace pocos días. Y es que no sé cómo pude vivir cinco años sin darme el LUJO de ver esta maravilla. Bueno, hace poco me rompieron el corazón otra vez. La historia de mi vida PERO que finalmente me hace encontrar estos tesoros. No me arrepiento un minuto de haber pasado por todo eso si me iba a llevar al encuentro con Walter White. Estoy TAN atrapada en la historia que me devoré las dos primeras temporadas en dos días. Me quedan dos más, y luego la primera mitad de la quinta, que está dividida en dos. Mi meta es hacerlo todo antes del 11 de Agosto y así estar al día cuando empiece la segunda mitad de la ÚLTIMA temporada :( Así es la cosa, la empecé a ver recién y ya se acaba. Oh well, my fault.

Bottom line de este mini post is, hay pocas cosas en la vida tan saludables y enriquecedoras como es enfocarte en una serie, y vivir tu vida a través de ella. Porque es más que un hobby o un capricho. Es como una droga, pero de esas buenas, esas que te hacen conocer gente que también la siga, y que te dan motivos para sobrevivir la semana porque sabes que pronto llegará el día del episodio nuevo. No voy a recomendar esta serie porque TODO el mundo la ha visto, no culpo a nadie por mi severo caso de lag.

Also, un gif de Friends porque FRIENDS.